El pasado día 15 de noviembre publicaba El País un artículo de Sami Naïr titulado "Inmigrantes comunitarios". El autor comenta la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que daba por buena una decisión del gobierno alemán sobre los no-derechos de una ciudadana rumana que solicitaba el acceso a los derechos sociales, pese a que rechazaba buscar un trabajo. Según Sami, esta sentencia servirá de justificación a una ley que parece va a aprobar el Bundestag que permitirá la expulsión de ciudadanos comunitarios que hayan perdido su empleo durante seis meses, a la vez que, vaticina el sagaz Sami, obligará a estos a aceptar cualquier condición laboral si no quieren ser expulsados del país. Todo lo cual, y alguna consideración más sobre los desastres de la política de austeridad impuesta por Merkel, lleva al articulista a lamentar el fracaso de la Europa social dado que "los europeos no han sabido ponerse de acuerdo sobre una base social mínima que permi